El ex presidente de Perú, Alberto Fujimori, comparecerá hoy frente a un tribunal que iniciará un megaproceso penal en su contra por acusaciones de violación a los derechos humanos y corrupción. La condena podría llegar hasta 30 años de cárcel y con una multa de unos 33 millones de dólares. El veredicto recién se conocería dentro de un año.

Según las estimaciones procesales el proceso judicial contra Fujimori, que gobernó entre 1990 y 2000, puede demorar más de un año. El presidente de la Corte Suprema, Francisco Távara, afirmó que Fujimori tendrá "un debido proceso y que no se permitirán presiones de ninguna naturaleza" contra los tres magistrados que juzgarán al ex mandatario peruano.

Por su parte, el abogado defensor de Fujimori, César Nakasaki, advirtió este domingo que existen dudas sobre la imparcialidad de los tres jueces que juzgarán a Fujimori, "debido a la fuerte presión mediática" contra el ex mandatario.

El primer juicio contra Fujimori, de 69 años y que gobernó con mano dura de 1990 a 2000 contra la guerrilla de Sendero Luminoso (maoísta) y del MRTA (guevarista), será por dos matanzas donde murieron 25 personas y por la detención irregular de un periodista y un empresarios contrarios a su régimen.
Son estos casos de derechos humanos los que empiezan a juzgarse este lunes, de los cuales el más emblemático de los excesos de la guerra sucia durante su régimen es el de las matanzas de Barrios Altos en 1991, con 15 muertos, y la Universidad de La Cantuta en 1992, con 10 muertos.

Como vemos, aplicó una política de "mano dura", persiguió a sus opositores y en su administración apareció un grupo militar denominado "Colina", que realizó operaciones criminales en ambos casos.

Capturados la mayor parte de civiles y militares de su régimen acusados de corrupción, Fujimori optó por ampararse en su doble nacionalidad de peruano y japonés, pero la justicia de Lima insistió en denunciarlo por decenas de delitos.

La Sala Penal Especial que juzgará a Fujimori será presidida por el juez César San Martín, de 51 años, asistido por los magistrados Hugo Príncipe y Víctor Prado. De este trío de jueces dependerá el futuro del ex gobernante. Se ignora si Fujimori hará uso de su derecho a guardar silencio durante el proceso, delegando en su abogado Nakazaki sus intervenciones. Una situación semejante se vivió en los juicios a su ex brazo derecho Vladimiro Montesinos, y al líder de la guerrilla Sendero Luminoso, Abimael Guzmán.

En Perú las penas no son acumulativas, por lo cual en caso de ser condenado, Fujimori sólo cumplirá la pena más alta que se le haya impuesto. Sin embargo, los fiscales pidieron 30 años de cárcel para el ex mandatario, que conserva cerca de 13 congresistas en el Poder Legislativo, incluida su hija, Keiko, que acaba de convertirlo en abuelo por primera vez.